Después de la formación para ser familia educadora nos hemos dado cuenta de que ahora no sólo estamos dispuestos, sino también preparados, para acoger a una personita en nuestras vidas.
No podíamos hacerlo antes, ni dejarlo pasar ahora.
Revisando nuestras vidas sabemos que es este y no otro el momento de empezar.
No podíamos hacerlo antes, ni dejarlo pasar ahora.
Revisando nuestras vidas sabemos que es este y no otro el momento de empezar.