Nuestr@s niñ@s

jueves, 25 de noviembre de 2010

Cuentos

Poco a poco vas aprendiendo que estar sentada un ratito largo con la atención en la misma cosa puede no ser aburrido.

Hemos descubierto que los cuentos, los libros con dibujos y los catálogos de las jugueterías que pueblan nuestro buzones son unos grandes aliados para momentos así.
Y señalamos ositos, conejos, soles, bicicletas, flores, árboles, casitas, bob esponjas, coches, bebés con o sin carrito, motos...
Y señalamos los ojos, orejas, las manos y pies, la nariz, el codo, la boca de todo lo que podemos.

Y así estás esta semana con los bailes y los cuentos, divertida y entretenida.

Con la comida sí que hemos notado que empiezas a ser más selectiva, más quejicosa. Te sigue gustando todo, pero ahora quieres decidir cuándo comértelo o simplemente no comerlo si no te apetece.

Thai esta semana está raro. Nos necesita más y nos reclama. Puede ser porque una compañera de su clase se ha cambiado de colegio; o puede ser porque han empezado los exámenes de la evaluación. Puede ser porque tiene 9 años y  comparte su casa, su vida, sus padres, su familia con una niña que llegó de repente y a la que ha tenido que acostumbrarse sin más. De cualquier forma, hemos aumentado la dosis diaria de cosquillas, abrazos y besos.
Es difícil no perder la perspectiva, la diferencia de vuestras edades nos hace verlo tan mayor que se nos diluye la idea de que todavía es un niño.
La tranquilidad que me queda es que de una u otra forma ha aprendido a pedir lo que necesita y se siente escuchado.